El Proceso Electoral transcurre entre la convocatoria a la elección y la proclamación de todas las autoridades electas y, dentro de éste, se dan una serie de eventos sucesivos con características propias y reguladas por la ley electoral, que consisten en la preparación, ejecución, control, hasta la proclamación de los resultados. Es por ello que los órganos administradores del proceso electoral pertenecientes al Tribunal Electoral, dado el carácter democrático del mismo, deben cumplir celosamente con todo lo establecido en la normativa electoral vigente. Así lo establece el Texto Único del Código Electoral en su artículo 331 que reza así:

 

Artículo 331. Durante el proceso electoral, el Tribunal Electoral tomará todas las medidas necesarias con el objeto de que se dé estricto cumplimiento a las disposiciones de la Constitución y de este Código que garantiza el sufragio.

 

Una de las condiciones necesarias para que haya elecciones democráticas, es la existencia y fiel cumplimiento de un calendario electoral, que inicia con la convocatoria a elecciones y concluye con la proclamación de las nuevas autoridades, lo que implica la resolución de todas las impugnaciones y reclamaciones que se generen.

 

También es fundamental contar con un calendario administrativo que tiene carácter interno, que asigna tareas específicas a todo el personal involucrado en la administración electoral. Este calendario administrativo en Panamá, de hecho, inicia formalmente con más de dos años de antelación a la fecha de las elecciones, como lo mandata el artículo 8 de la Ley 5 de 9 de marzo de 2016, Orgánica del Tribunal Electoral. El cumplimiento de estos términos se rige por un estricto principio de oportunidad, en el que paso a paso se va dando forma a las dinámicas de planificación, ejecución e implementación y retroalimentación de las consultas populares electorales.

 

Es por esto, que con el  propósito de establecer mecanismos que faciliten la planificación, supervisión, control, evaluación del proceso electoral, se diseña el Plan General de Elecciones (PLAGEL) que, con el manejo eficiente de la tecnología, con  herramientas informáticas, tales como el PROJECT, crean sinergias intra y extrainstitucionales, que se han convertido en el instrumento fundamental de coordinación y seguimiento de las más de 1,000 actividades que se requieren ejecutar eficientemente para el desarrollo exitoso del evento electoral.

 

Esta valiosa herramienta tiene su génesis en la planificación de las elecciones de esta era democrática postinvasión, cuando, con la asistencia técnica de IDEA Internacional, para hacerle frente al Referéndum del 15 de noviembre de 1992, se establece en 1991, un innovador modelo de organización que contó con 27 programas electorales, cada uno de ellos responsable del cumplimiento de objetivos programáticos específicos.

 

Así, ha ido evolucionando y perfeccionándose, proceso tras proceso, hasta llegar a la estructura del PLAGEL que hoy instalamos, conformado por un magistrado quien lo dirige (Director del Proyecto), la Coordinación General cargo del Director y Sub Director Nacional de Organización Electoral, treinta y tres (33) comisiones, cada una a cargo de un responsable y corresponsable, seis (6) subcomisiones y dieciséis (16) Direcciones Regionales del Tribunal Electoral en todo el país, quienes independientemente de sus tareas diarias, desarrollarán de forma paralela actividades específicas relacionadas con la organización del torneo electoral para la gestión exitosa y transparente de las elecciones generales de 2024.

 

Dentro de los componentes vitales que renuevan al PLAGEL se tienen: La Comisión de accesibilidad al voto, que promueve la inclusión real de todos, más allá de las buenas intenciones, sin discriminación; el fortalecimiento de la Subcomisión de voto en hospitales, y centros de atención al adulto mayor, que contribuye a disipar el fantasma de la exclusión; la Comisión de reproducción de actas, que suma controles de calidad a los contenidos de los documentos electorales, en pro de la pureza del sufragio, al momento de plasmarse la voluntad popular y la de Medios Digitales, que ofrece certezas frente al error humano, entre otras, que suman a nuestros esfuerzos, hasta el momento recompensados, con la visibilidad del TE, como una entidad de calidad óptima de clase única.

 

Cada minúsculo detalle, por insignificante que parezca, será atendido dentro de esta organización con la mayor diligencia, en pro del voto informado, para que el ente rector electoral, pueda ejercitar su labor de fortalecer la democracia procesal, con tal excelencia, que proporcione certeza de legalidad y buenas prácticas en la ciudadanía y observadores de todo el mundo.

 

La interconexión de saberes y procederes; teoría y praxis; y competencias democráticas transversales, concatenadas, con el refuerzo de lo aprendido de los logros y desaciertos en lo empírico, más allá de lo plasmado en letra jurídica, es lo que nos permite situarnos en una posición de depurar cada vez más y mejor, nuestra incidencia cívica en los destinos de la República. Este saber del qué y el cómo hacer mejor las cosas, se proyecta en reformas que mantienen viva, lejos de un estancamiento, la innegable y estratégica labor del Tribunal Electoral, la cual es un potente paliativo del conflicto social que ciega a veces la visión de nuestra democracia.

 

Este riguroso seguimiento a las tareas de planificación y organización del proceso electoral es lo que permite la ejecución exitosa y transparente de las elecciones generales, de allí la relevancia que tiene para el país el establecimiento del Plan General de Elecciones, que comprende un periodo de trabajo de tres años, lo que permite distribuir el costo de las elecciones en 3 años fiscales, disminuyendo el impacto sobre el presupuesto nacional.

 

El presupuesto del Tribunal Electoral para las elecciones generales del año 2024, es asignado por el gobierno nacional en tres años consecutivos, iniciando dos años antes de la fecha del evento, es decir, en el 2022 y 2023 y, el año del evento 2024. Para la vigencia 2022, el presupuesto ley aprobado fue de B/. 5,922,121.00. Para los años 2023 y 2024, aún estamos trabajando en las estimaciones.

 

Como dato relevante, el costo de los últimos tres procesos electorales es el siguiente:

 

 

 

 

 

Ahora bien, tan importante como la planificación y organización del proceso, lo es la evaluación final que se hace del PLAGEL al término de cada proceso electoral, con la intención no solo de detectar fallas que se hayan cometido, sino de identificar las causas y los mecanismos de ajustes necesarios que conduzcan a una cada vez mejor organización de los procesos electorales.

 

Como es sabido, desde la vuelta a la democracia en Panamá, cada proceso electoral ha sido prístino y sus resultados nunca han sido objetados. La transparencia con que el Tribunal Electoral maneja la organización del proceso electoral es reconocida por propios y extraños y ese es el aval de conformar con la suficiente antelación el PLAGEL, tal como lo hemos hecho siempre y como lo hacemos ahora.

 

La organización a tiempo de este Plan nos permite amplificar y revisar con lupa, cada uno de los detalles que demanda el evento más trascendental para la democracia del país y con ello, que el proceso electoral sea una verdadera fiesta democrática de libre ejercicio de derechos políticos.

 

A los colaboradores que forman parte del PLAGEL, les reiteramos la confianza y apoyo del Pleno, en cada una de las tareas que dentro de sus comisiones, subcomisiones y oficinas regionales, pondrán en marcha a partir de este momento.

La gran mayoría de los integrantes del PLAGEL conoce de la inmensa responsabilidad que tenemos por delante.

 

Sabemos que es un esfuerzo extraordinario que todos tenemos que hacer independientemente de las tareas cotidianas que nos impone el día a día, pero la recompensa llega con la satisfacción que nos da al final el haberle cumplido a la patria, a nuestros ciudadanos y lo más importante, de contribuir al desarrollo y fortalecimiento de nuestra democracia, requisito indispensable para el desarrollo integral de la institucionalidad panameña.

 

Es reconocida la mística de trabajo y el empeño que el colaborador del Tribunal Electoral pone en el desarrollo de esta gran misión. Ustedes son la garantía del éxito y los verdaderos héroes que hacen posible que cada quinquenio, el país viva esta experiencia electoral en armonía y sana convivencia, como demanda todo proceso que se digne llamar democrático.

 

A ustedes, desde ya nuestro reconocimiento y exhortación a brindar, como hasta ahora lo han hecho, lo mejor de cada uno de ustedes, y así seguir contribuyendo a elevar el prestigio de nuestra institución, del que goza no solo a nivel local, sino allende nuestras fronteras.

 

Pedimos a Dios que nos dé sabiduría a cada uno de los integrantes del PLAGEL para llevar con entrega y mística las tareas que tenemos por delante con el más alto sentido del deber y responsabilidad para con nuestro país y nuestros electores.

 

Somos un haz de voluntades que dejará en alto el nombre de Panamá y con ello el de nuestra institución.

 

Que Dios los bendiga y los ilumine en cada una de sus obligaciones. De nuestra parte, reiteramos, una vez más, nuestro apoyo y reconocimiento al sentido del deber de cada uno de los colaboradores del Tribunal Electoral, y en especial a partir de este momento, que la patria nos exige el mayor de los esfuerzos.

 

¡Gracias a todos ustedes por ser parte del aporte fundamental que brinda al país, esta noble y valiente institución!